Un funcionario estatal que fue secuestrado hace dos días en Baja California, noroeste de México, apareció hoy viernes muerto, con los genitales cortados dentro de su boca, y colgado de un puente en Tijuana, ciudad fronteriza con Estados Unidos, informaron fuentes oficiales.
Fuentes de la fiscalía del estado identificaron al individuo como Rogelio Sánchez Jiménez, quien era Jefe de Licencias y Placas Vehiculares en el Gobierno de Baja California.
Esta mañana fue hallado el cadáver colgado de un puente por el cuello en la carretera Tijuana-Playas de Rosarito, con aparentes signos de tortura, después de que algunos conductores alertaran a la policía de la existencia del cuerpo. La víctima tenía la cabeza envuelta en cinta adhesiva y sus genitales cortados y metidos en su boca.
El sujeto fue secuestrado la mañana del pasado miércoles en el fraccionamiento de La Sierra, cuando viajaba en un automóvil en compañía de sus hijas. Al parecer ese día un grupo de hombres armados hizo chocar una camioneta contra el vehículo del funcionario público, tras lo cual Sánchez se bajó de su auto y fue secuestrado.
Medios locales detallaron que el lugar donde fue dejado el cadáver está cerca de las instalaciones militares del Aguaje de la Tuna.
La muerte tiene lugar en el marco de la ola de violencia asociada con el crimen organizado que se ha desatado en México, donde en lo que va de año se han cometido 5.683 homicidios dolosos, según datos extraoficiales que hoy publica el periódico El Universal.
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